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Barcelona-Real Madrid: igualdad total, pero ocho puntos de diferencia

Estamos a principios de octubre y Barcelona y Real Madrid (o Real Madrid y Barcelona, como se prefiera) ya se han enfrentado tres veces en esta temporada 12/13: los dos partidos de la Supercopa y una vez en Liga. Tres partidos, tres resultados: un triunfo para cada equipo y el empate de ayer, aunque es cierto que los blancos ya han ganado un título. El último de los tres, el de Liga, evidenció que ambos conjuntos están a un nivel muy parejo, en todos los sentidos (mentalidad, juego colectivo, individualidades…), pero el problema es que al Real Madrid le lastra su mal comienzo liguero y va a ser muy difícil que le remonte ocho puntos al Barcelona.

Buen partido el que se vio en el Camp Nou. No fue espectacular, pero sí de buen nivel general. Empezó mejor el Real Madrid y acabó mejor el Barcelona. Hubo alternativas en el juego, ocasiones repartidas… Por empatar, empataron hasta en las jugadas polémicas. Para no variar, Messi y Cristiano Ronaldo también empataron: dos goles cada uno, ambos fundamentales en sus equipos. Son los que transforman en goles el juego y el estilo de sus respectivos equipos y ninguno de los dos falló. Sigue alimentándose el debate sobre quien es mejor.

Y más allá del partido, dos cositas. Una: no es igual el Barcelona de Tito Vilanova que el de Guardiola. El de Tito tiene menos pausa y elabora un poquito menos. Y que sufre más en defensa. Parece menos inaccesible, pero la realidad es que sólo el Madrid le ha frenado. No se puede aún si es mejor o peor, eso lo dirá el tiempo.  Dos: el Real Madrid ya ha cogido la velocidad de crucero, y vuelve a hacer de la presión y los contragolpes un arte. Pero está a ocho puntos del Barcelona y puede que esa sea demasiada diferencia. Y ojo a equipos como el Atlético de Madrid

El fútbol es especial, para bien y para mal

Cristiano Ronaldo. EFE

La ‘tristeza’ de Cristiano Ronaldo está copando mucho (demasiado) espacio en la información deportiva de los distintos medios, en algunos casos hasta por encima de la actualidad pura y dura. Más allá de que cada medio/empresa es libre de informar/actuar como le plazca, este asunto y sus consecuencias (las que ya se están dando y las que vendrán) refrendan que el fútbol ha calado tanto en la población que, a veces, tiene unos códigos distintos al del resto de la sociedad en la que se engloba. En este caso para mal. Lee el resto de esta entrada